Los crepusculares reaccionaron con el madero para llevarse el primero de la serie en Margarita

Punta Cana, RD. Los Cardenales de Lara irrumpieron en Margarita para alzar vuelo este miércoles, y llevarse su primera victoria de la presente final de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP). Los crepusculares salieron victoriosos en el estadio Nueva Esparta de Guatamare, al doblegar 9-2 a los Bravos de Margarita.

Cardenales madrugó al serpentinero Ángel Rondón en el primer inning, para fabricar dos rayitas. El responsable de las dos carreras realizadas por los larenses fue Rangel Ravelo, que despachó su cuarto jonrón de la postemporada y colocó el juego 2-0.

En la baja del primer capítulo, Bravos descontó en la pizarra gracias a un inatrapable remolcador de Juan Santana. Con ese sencillo trajo al plato a Lorenzo Cedrola, con la primera rayita de los insulares.

Max Castillo, se llevó el triunfo tras maniatar a la toletería de los Bravos de Margarita

Entre el tercero, cuarto y quinto inning, los visitantes fueron oportunos con el bateo para fabricar una rayita en cada entrada respectivamente. Harold Castro trajo una carrera con sencillo impulsor, mientras que, Alí Sánchez, amplió la ventaja crepuscular con un imparable. Luego, en el quinto tramo, Castro aparecería nuevamente para traer la quinta de los larenses con un rodado de out.

Los locales descontaron una rayita en el sexto episodio para acercarse en el marcador. José Martínez sonó inatrapable impulsor, para dejar las acciones 5-2 en ese momento del compromiso.

Cifra record de asistencia con 14,982 fanáticos

Con un rally de tres anotaciones en el séptimo inning, Cardenales abrió el cotejo a su favor. Gorkys Hernández trajo una más para los pájaros rojos con doblete, mientras que, José Rondón, negoció boleto a casa llena y, Danry Vásquez, pegó sencillo para completar el rally de tres carreras.

La última anotación la empujó Jecksson Flores, que con un batazo para doble play en el noveno episodio, que mandó al plato a José Rondón, con la carrera definitiva del encuentro.

El lanzador Brian McKenna es pieza vital en el relevo larense

Soberbio en la lomita

Tras un Round Robin para el olvido, Max Castillo, retomó el ritmo en la final, para llevarse el lauro del tras maniatar con solvencia a la toletería de los Bravos de Margarita.

El diestro lanzó con solvencia durante cinco entradas, en las que permitió seis inatrapables, una carrera, regaló tres bases por bolas y pasó por la guillotina a tres contrarios, para dejar su efectividad en 6.75 en la postemporada.

Fuente. Prensa Cardenales

About The Author

Related Post

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *